Otra vuelta de tuerca del Sistema de Terror Económico-Militar es la retransmisión de esta serie de miedo que nos mantiene pegados a la TV, día y noche, pues el mercado contínuo no descansa y con él la caída de las bolsas. Y ahí nos tienen a todos "cagaïtos" por los "cuatro durillos" que tenemos en el Banco (quién sabe dónde). Todo parece justíficar los cierres de empresas, muchas de ellas ya habían aprovechado la globalización neoliberal para acometer su deslocalizaciones, y así se sacan de encima fábricas que no son tan "competitivas" como las que tienen en terceros países. Por desgracia durante años y años se ha vaciado de política las calles con la ayuda de los sindicatos, y ahora lo que representaría un desafío a la clase obrera que, penalizada por la crisis organizaría su respuesta, simplemente recibe como réplica al miedo propagado, el silencio (de los corderos).
Queda lejos el valiente mensaje de aquellas épicas palabras de Buenaventura Durruti:"...no nos asustan las ruinas. Vamos a convertirnos en los herederos de la tierra. La burguesía puede hacer saltar por los aires y arruinar su mundo antes de abandonar el escenario de la historia. Pero nosotros llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones."
Queda lejos el valiente mensaje de aquellas épicas palabras de Buenaventura Durruti:"...no nos asustan las ruinas. Vamos a convertirnos en los herederos de la tierra. La burguesía puede hacer saltar por los aires y arruinar su mundo antes de abandonar el escenario de la historia. Pero nosotros llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones."
1 comentario:
Se podría empezar por acabar con esa casta de privilegiados que además de hundir sus empresas y dejar sin trabajo a miles de personas, se largan con los bolsillos a rebosar.A esas indemnizaciones de cifras estratosféricas, les llaman golden parachutes (paracaídas de oro). Buen eufemismo para lo que es sin duda el robo más descarado del siglo.
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