Al poco de ser detenida TAMARA HERNÁNDEZ HERAS, ante las protestas organizadas, fue trasladada desde la cárcel de Wad-Ras en el Poblenou (Barcelona), a Can Brians. Es la fórmula de dispersión de presos que se aplica desde el Estado en general y desde sus sucursales (Generalitat) en particular.La dirección donde se encuentra secuestrada es:
C.P. Brians - Dones Carretera de Martorell a Capellades,km 23
Codigo Postal 08635 - Sant Esteve Sesrovires (Barcelona)
Número de cuenta de apoyo la campaña (para Tamara, gastos judiciales y de disfusión):
3146-8106-55-2503552727 NOVANCA: novanca.com
+ Infomación en : http://tamaraalacalle.blogspot.com/
No caeremos en la trampa de defender la violencia, estamos en contra de TODA VIOLENCIA y al decir VIOLENCIA, así en mayúscula, nos referimos a la del Estado, esa que es TODA, su TOTALIDAD. La violencia de un Sistema que impone la explotación económica y moral, que se justifica con sus leyes y jueces, que se impone por la fuerza de las armas y que se defiende desde los "medios de masas", que entretienen al público y lo reeducan en la estupidez. Pero a nosotros no nos engañarán, pues sólo hay que tener algo de ser humano para comprender que eso que el sistema llama violencia no deja de ser marginalidad, reflejo de su orden de las cosas, o como en el caso de Tamara* una protesta. Una protesta por la situación en la que se ha abandonado a Amadeu Casellas en la cárcel, en una práctica cadena perpetua.
Liberad a Tamara!
*(de medios libertarios) "El Jueves 17 de Diciembre ha sido encarcelada preventivamente en la cárcel de mujeres de Wad-Ras y tras pasar por el juzgado de instrucción número 25 de Barcelona, Tamara, compañera anarquista de Madrid. Se le acusa de haber enviado un paquete explosivo contra Albert Batlle, Secretario de Serveis Penitenciaris de la Generalitat.
El envío se produjo en Octubre, en el marco de una campaña de lucha contra el sistema penitenciario y en solidaridad con el preso Amadeu Casellas, en esos momentos en huelga de hambre, y mientras un grupo de personas solidarias se concentraban en la calle y frente al edificio, en solidaridad con Amadeu, y para solicitar una entrevista con dicho responsable. La presencia policial, fue la habitual en este tipo de concentraciones y en ningún momento se avisó, ni a lxs concentradxs, ni a lxs trabajadorxs del edificio.
Todos los medios de información difundieron que se trataba de un envío de escasa potencia y que por ese motivo fue explosionado de forma controlada en el mismo edificio por los artificieros del Tedax de los Mossos de Esquadra, sin que nadie se percatara de la detonación. Tampoco se desalojó el edificio, lo que confirma la poca efectividad de la sustancia explosiva. En algún medio de comunicación y en diferentes foros, algunos funcionarixs que se encontraban trabajando en el edificio ese día, se quejaron de que nadie les advirtiera de dicha situación, lo que pone en duda la peligrosidad del supuesto explosivo.
Ese mismo día, Albert Batlle se encontraba en el edificio, y un grupo de personas del grupo de apoyo entre las que se encontraba la madre de Amadeu, entraron hasta el vestíbulo del edificio para solicitar una entrevista que, pese a las promesas no les ha sido concedida aún. En ese mismo momento, también hizo acto de aparición, la Consellera de Justicia Montserrat Tura, que se reunió con Albert Batlle, tras una puerta en la zona del vestíbulo. En todo momento, se aseguró que el envío tenía muy poca cantidad de explosivo, y por eso tanto el Director de Serveis Penitenciaris, como la Consellera de Justícia, no tomaron medidas especiales e incluso se reunieron en el propio edificio. Lo más preocupante de dicha situación, ha sido todo el silencio y oscurantismo con el que llevaron esta situación, lo que abre la sospecha a que frente a una situación que probablemente no comportaba un riesgo real, hayan creado toda una alarma social para preparar una acusación fiscal completamente desproporcionada: asesinato en grado de tentativa.
Una vez más, el Estado utiliza las detenciones y los encarcelamientos para aterrorizar a aquellas y aquellos que plantan cara a la sinrazón represiva de un sistema que necesita de las prisiones para controlar la pobreza y la rebeldía que él mismo suscita."
El envío se produjo en Octubre, en el marco de una campaña de lucha contra el sistema penitenciario y en solidaridad con el preso Amadeu Casellas, en esos momentos en huelga de hambre, y mientras un grupo de personas solidarias se concentraban en la calle y frente al edificio, en solidaridad con Amadeu, y para solicitar una entrevista con dicho responsable. La presencia policial, fue la habitual en este tipo de concentraciones y en ningún momento se avisó, ni a lxs concentradxs, ni a lxs trabajadorxs del edificio.
Todos los medios de información difundieron que se trataba de un envío de escasa potencia y que por ese motivo fue explosionado de forma controlada en el mismo edificio por los artificieros del Tedax de los Mossos de Esquadra, sin que nadie se percatara de la detonación. Tampoco se desalojó el edificio, lo que confirma la poca efectividad de la sustancia explosiva. En algún medio de comunicación y en diferentes foros, algunos funcionarixs que se encontraban trabajando en el edificio ese día, se quejaron de que nadie les advirtiera de dicha situación, lo que pone en duda la peligrosidad del supuesto explosivo.
Ese mismo día, Albert Batlle se encontraba en el edificio, y un grupo de personas del grupo de apoyo entre las que se encontraba la madre de Amadeu, entraron hasta el vestíbulo del edificio para solicitar una entrevista que, pese a las promesas no les ha sido concedida aún. En ese mismo momento, también hizo acto de aparición, la Consellera de Justicia Montserrat Tura, que se reunió con Albert Batlle, tras una puerta en la zona del vestíbulo. En todo momento, se aseguró que el envío tenía muy poca cantidad de explosivo, y por eso tanto el Director de Serveis Penitenciaris, como la Consellera de Justícia, no tomaron medidas especiales e incluso se reunieron en el propio edificio. Lo más preocupante de dicha situación, ha sido todo el silencio y oscurantismo con el que llevaron esta situación, lo que abre la sospecha a que frente a una situación que probablemente no comportaba un riesgo real, hayan creado toda una alarma social para preparar una acusación fiscal completamente desproporcionada: asesinato en grado de tentativa.
Una vez más, el Estado utiliza las detenciones y los encarcelamientos para aterrorizar a aquellas y aquellos que plantan cara a la sinrazón represiva de un sistema que necesita de las prisiones para controlar la pobreza y la rebeldía que él mismo suscita."
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